Crítica de Lover de Taylor Swift, ¿su Witness particular?

Este 23 de agosto se ha publicado Lover de Taylor Swift. Se trata del séptimo álbum de toda su carrera y el primero que llega al mercado sin que se hayan cumplido 22 meses desde el anterior, reputation, un gran éxito, pero lejos de las cifras alcanzadas por 1989 (2014). Durante el cuatrimestre que ha precedido el lanzamiento de Lover, Swift ha seguido dando pasos para consolidarse como una estrella que muestra sus ideas políticas y defiende los Derechos Humanos, un camino que inició en octubre de 2018.

La portada de Lover de Taylor Swift. En colores pastel, contrasta con la oscuridad de la de reputation (2017).

Aunque sus perfiles hayan sido diferentes, resulta difícil no pensar en la era Witness de Katy Perry al hablar de Lover de Taylor Swift.

Para las 2 etapas, tanto Perry como Swift centraron parte de sus esfuerzos en dejar claras sus posturas políticas: demócratas, a favor del colectivo LGTBIQ y en contra del machismo y racismo.

Eso sí, mientras que Katy Perry cometió algunos fallos durante la promoción de Witness, como burlarse de los problemas mentales de Britney Spears, contradecir el mensaje de sororidad con una ambigua letra en Swish Swish o colaborar con Migos (cuando la homfobia no era un problema para elles), el activismo de Taylor Swift ha sido impecable:

• Se ha reconciliado con Katy Perry
• Las ganancias del sencillo You Need to Calm Down han sido donadas a GLAAD
• Ha escrito al senador republicane Lamar Alexande e iniciado una campaña para que el senado de Estados Unidos apruebe la Ley de Igualdad
• Ha defendido la igualdad salarial, tras recibir el Icon Award en los Teen Choice Awards 2019, aplaudiendo la labor de Megan Rapinoe, feminista lesbiana visible y capitana de la selección femenina de fútbol estadounidense, que lucha por la igualdad salarial y de condiciones de trabajo, sin que la etnia, identidad de género y orientación sexual sean motivos de discriminación

Captura del videoclip de la pro LGTBIQ You Need to Calm Down, en el momento en el que Taylor Swift y Katy Perry sellan su reconciliación con un emocionante abrazo.

Otra similitud entre las eras Lover de Taylor Swift y Witness de Katy Perry es la pérdida de impacto comercial. Aunque la de Perry fue mucho más acusada (solo Chained to the Rhythm entró en el top 10 de la mayoría de mercados clave), sí es cierto que, aún siento top 2, el éxito, tanto ME! como You Need to Calm Down, ha sido bastante momentáneo.

En este sentido, experimenta una leve mejoría respecto al funcionamiento de los sencillos de reputation, pero sigue evidenciando que Taylor Swift “sufre” para que sus canciones se mantengan entre las 10 más populares de las listas de ventas.

Antes de la era Lover, las incursiones políticas de Taylor Swift

Además de las donaciones que Swift ha realizado a la Cruz Roja, a asociaciones que ayudan a personas afectadas por diferentes desastres naturales, a centros educativos o a la fundación contra el VIH-SIDA de Elthon John, la cantante ha llevado las siguientes labores de corte político:

• En 2008, participó en la campaña Every Woman Counts (cada mujer cuenta), cuyo objetivo era lograr que las mujeres votaran
• Ese mismo año, cuando Barack Obama (partido demócrata) ganó las elecciones y se convirtió en Presidente de Estados Unidos, Swift declaró haberle votado
• Cuando Larry King, adolescente de 14 años, fue asesinade por ser gay, Swift grabó, junto a otras estrellas, un vídeo en contra de la discriminación y los crímenes de odio para GLSEN (asociación que lucha contra el bullying LGTBIQfóbico en Estados Unidos)

• El videoclip del himno anti bullying Mean (2011) visibiliza la homofobia en los institutos estadounidenses
• En 2014, se declaró feminista
• Desde ese año, ha luchado para que las plataformas de streaming y las discográficas paguen a les artistas el dinero que les corresponde, en lugar de cantidades irrisorias (en comparación con lo que llegan a facturar estas compañías)
• Ya en 2018, pero antes de octubre (cuando se produjo su declaración política más explícita), colaboró con el movimiento Time’s Up, cuyo objetivo es proteger a las mujeres del acoso sexual y la discriminación
• En marzo de 2018, se declaró a favor del control de armas en Estados Unidos y donó dinero a March for Our Lives
• Un mes después, también realizó una donación a la red estadounidense contra la violación, el abuso y el incesto (RAINN)

La teoría sobre la existencia previa de Lover de Taylor Swift

Hacia el final del videoclip de Look What You Made Me Do, aparecen diferentes Taylor Swift a los pies de un avión. Cada una de ellas escenifica alguna declaración, comportamiento o crítica recibida a lo largo de su carrera.

Sin embargo, hay una que no dice nada, que solo, unos segundos antes, ha pintado en el avión TS 6 (en relación al título provisional del sexto disco de Swift) la palabra Reputation.

El presunto personaje Lover de Taylor Swift en el videoclip de Look What You Made Me Do.

Según Sebas G Mouret, una facción del fanbase de Taylor Swift está convencida de que en otoño de 2016 la artista tenía terminado un álbum para lanzarlo (todos los discos de Swift hasta reputation se publicaron en otoño de meses pares: 2006, 2008, 2010, 2012 y 2014), pero no lo hizo.

La razón de ello sería que el conflicto con Kanye West y Kim Kim Kardashian, además de la enemistad con Katy Perry, la polémica por la composición de This Is What You Came For y la pérdida de su credibilidad estaban demasiado recientes y un disco luminoso no tendría ningún sentido.

Por eso, corta el ala del TS 6 ya grabado, aborta su lanzamiento y lo sustituye por reputation. Una vez superada esta era, en la que dejaba claro que no iba a tolerar más calumnias y se calmaron las aguas con todes les implicades, el viento soplaría a su favor para sacar el verdadero sexto disco (modificado para que le represente en 2019), pero como el séptimo.

Además del videoclip de Look What You Made Me Do, existe la teoría de que Swift avisaba de que antes de reputation se compuso ME!, el primer sencillo de Lover. En concreto, esta referencia se encontraría en End Game, el tercer sencillo del álbum: “reputation precedes me”.

Lover de Taylor Swift, canción a canción

I Forgot That You Existed

Entre el r&b, el doo-wop y el pop se mueve el mediocre (desde el punto de vista musical) tema con el que se inicia Lover de Taylor Swift. De hecho, su insignificancia es tal que lastra la primera escucha del álbum.

La razón de ello es que I Forgot That You Existed, una composición de absoluto relleno, parece confirmar las sospechas que los 2 primeros sencillos adelantaban: Lover como álbum de pop genérico, en la línea de Hurts 2B Human de P!nk, y una aparente actitud forzada de casa de la gominola en la calle de la Piruleta.

Las apariencias engañan

En el sentido descrito en los párrafos anteriores, I Forgot That You Existed conecta con el arranque de 1989, el simplón y, a ratos, irritante Welcome to New York.

Sin embargo, a pesar de que Welcome to New York se pegaba al momento y I Forgot That You Existed, no, esta última marca donde fallaba el homenaje a la Gran Manzana de Swift: tiene mensaje, dado que es una oda a la indiferencia ante las personas que hacen daño.

De esta forma, la simplicidad de I Forgot That You Existed es, al final, su gran virtud y toda una declaración de intenciones de lo que nos espera al escuchar Lover.

Cruel Summer

También decepciona en la primera escucha esta canción co-escrita por Taylor Swift, St. Vicent y Jack Antonoff, cuyo título hace referencia a al álbum de 2012 Kanye West Presents: Good Music – Cruel Summer.

Tanto Swift como Antonoff han compuesto y producido la mayor parte de Lover. Por eso, la desilusión es el resultado de las altas expectativas puestas en St. Vicent, que viene de firmar 2 eras excepcionales, la homónima (2014) y Masseduction (2017 y 2018).

Aunque la primera vez lo único que despierta el interés es la melodía synthwave, a diferencia de I Forgot That You Existed, Cruel Summer sí logra convencer en las sucesivas escuchas, cuando despliega todos sus encantos (el de 2016 fue un verano cruel para Swift porque reventó el conflicto con West, pero enamorarse de su actual pareja lo compensó).

Sin llegar al nivel de perfección de Out Of The Woods de 1989 o Dancing With Our Hands Tied de reputation, deja claro que el synthpop, en general, y el synthwave, en particular, son, junto al hip hop, los géneros musicales con los que Taylor Swift entrega las mejores canciones de su vertiente pop.

Como curiosidad, Cruel Summer son las palabras que le están tatuando a Ellen DeGeneres en un momento del vídeo de You Need to Calm Down.

Cruel Summer en el brazo de Ellen DeGeneres.

Lover

New Years’ Day era la canción con la que Taylor Swift cerraba reputation. Lo hacía acompañada solo de un piano y una guitarra acústica, algo que parecía una señal de que la vieja Taylor no estaba muerta del todo y de que, tal vez, en el futuro, volveríamos a tener noticias de ella.

Menos de 2 años después, la artista lanza Lover, tema con el que da un paso más que con New Years’s Day y vuelve al country. Lo hace, eso sí, en la exquisita línea alt-country de Safe & Sound (2011), su tema para la banda sonora de Los Juegos del Hambre. Además, le añade el poso soul que tienen muchas de las canciones de Taylor Swift desde Shake It Off (2014).

En efecto, tras la olvidable  I Forgot That You Existed y la correcta Cruel Summer, esta es la primera joya incontestable de Lover de Taylor Swift. Lanzada el 16 de agosto, es el tercer sencillo del álbum.

The Man

A Taylor Swift le gusta dejar diferentes pistas de nombres de sencillos o álbumes en los videoclips. Por ejemplo, en You Need to Calm Down, adelantaba la existencia de Cruel Summer y, también, de The Man. En este caso, con las icónicas declaraciones de Cher en 1996 “mamá, no necesito a un hombre rico. Yo soy un hombre rico”:

Con unos beats más decididos que los de Cruel Summer y un mayor protagonismo de la batería, Taylor Swift vuelve a acertar al abordar el synthpop de ecos synthwave.

Por cierto, la referencia a Cher en el vídeo de You Need to Calm Down está más que justificada porque The Man es una composición de corte feminista que denuncia la doble vara de medir de los comportamientos, según quién los lleve a cabo.

Mom, I am a rich man en el clip de You Need to Calm Down, segundo sencillo de Lover de Taylor Swift.

A lo largo de su carrera, Taylor Swift ha salido con diferentes hombres y siempre ha sido criticada por ello. En cambio, si fuese un hombre, todas esas relaciones le proporcionarían prestigio social y serían descritas como parte de una búsqueda hacia la mujer adecuada.

En otra estrofa, Swift hace referencia a por qué está bien visto que los artistas hombres alardeen del dinero que tienen, de las mujeres que consiguen con ello y lo hagan yendo de “malotes”. Si ella o cualquier mujer hiciese algo parecido, la historia cambiaría y la tacharían de (palabras textuales) perra y malvada.

Cómo cambian los adjetivos si los comportamientos son de hombre o de mujer. Esto es lo que denuncia The Man de Lover de Taylor Swift (fuente: Facebook de Es De Politólogos).

Actualización 2020

Desde el 27 de enero de 2020, The Man es el cuarto sencillo de Lover de Taylor Swift. En su videoclip, estrenado un mes después, Swift interpreta a un hombre de negocios “machote” e irreverente a lo Lobo de Wall Street con su plantilla, que acostumbra a hacer manspreading (sentarse de forma despatarrada, ocupando todo el espacio), que es aplaudido como padre del año por cuidar de su hija un rato o que presume de dinero en un club de strippers.

En la primera semana de vida de Lover, The Man debutó en el puesto 23 de la Billboard 100 estadounidense y, a 27 de febrero, supera los 114 millones de escuchas en Spotify. Como consecuencia, se prevé que el lanzamiento del vídeo proporcione a Taylor Swift un nuevo top 10 en sencillos.

The Archer

Lover de Taylor Swift sigue viento en popa con el que ha sido el tercer tema que conocimos del álbum. Se trata de una magnífica y envolvente pieza synthwave y dream pop, cuya letra rinde homenaje al cuento de hadas inglés Humpty Dumpty, un huevo animado que en la cultura popular hace referencia a personas quebradas.

I Think He Knows

La buena racha de grandes canciones de Lover de Taylor Swift se rompe con I Think He Knows, un correcto tema de relleno, que fusiona synthpop y funk.

Miss Americana & The Heartbreak Prince

En 1989, Taylor Swift incluyó un tema muy similar a Without You de Lana del Rey: Wildest Dreams. En esa ocasión, Swift se inspiraba en la música baroque pop y trip hop de del Rey.

Un lustro después, la co-autora de Video Games ha vuelto a ser influencia evidente para Taylor Swift. Aunque, ahora, en la magnífica Miss Americana & The Heartbreak Prince, por la vía del dream pop, unos tenues hip hop y soul/doo-wop y, de nuevo, una forma de interpretar parecida a la de Lana del Rey.

Paper Rings

Las guitarras eléctricas no son para nada ajenas a la discografía de Taytlor Swift. De hecho, en contra de lo que se suele pensar, cuando era una artista de country, más bien, lo era de country pop (I’m Only Me When I’m With You), country rock (Enchanted) y de pop/rock (Change), donde también había cabida para el rock (Better than Revenge) y algún coqueteo con el rock alternativo (Haunted, Eyes Open o The Last Time).

Debido a ello, no sorprende que Paper Rings se mueva en un terreno entre el rockabilly y el country. No obstante, sí que llama la atención como tema de Lover, dado que es, junto a ME!, el único uptempo del trabajo.

Esta presencia de sonidos clásicos de la música estadounidense, intercalados con melodías synthpop-synthwave lleva a pensar que el séptimo álbum de Swift bien podría haberse concebido como una integración de Red y 1989.

Cornelia Street

Al igual que en I Forgot That You Existed y I Know He Knows, Lover mantiene la dignidad con este otro tema de relleno, cuyo mayor atractivo es la base synthpop.

Death By a Thousand Cuts

El nivel remonta un poco con esta composición pop acompañada de guitarra acústica y unos coros próximos al góspel. Pese a ello, Death By a Thousand Cuts no puede considerarse más que otra canción de relleno y ya van 4 dentro de las 10 primeras de Lover.

Por ejemplo, en los casos de Red, 1989 y reputation, entre los 10 primeros cortes no había relleno, solo piezas menores, es decir, eran reconocibles y aportaban algo sin que diese la sensación de que habían salido de variar, mínimamente, un mismo origen común.

London Boy

En ese terreno entre el hip hop y el soul, tan propio de la Taylor Swift post-Red, se mueve el quinto tema de relleno de Lover, el más insípido de todos.

Soon You’ll Get Better

A los 11 años, Swift quiso probar suerte en la industria musical. Para ello, se trasladó junto a su madre a Nashville con el objetivo de presentar a diferentes discográficas unas maquetas de versiones de artistas country: Dolly Parton y Dixie Chicks.

Entonces, fue rechazada por no contar con nada que le diferenciase de cantantes con las pretensiones de hacerse un hueco en la escena country.

Tan solo 5 años después, Taylor Swift se convertía en una estrella de la música country y, entre 2012 y 2014, del pop internacional. Ahora, transcurridas casi 2 décadas de esas versiones, lanza esta sentida y contenida colaboración country con Dixie Chicks.

Dedicada a Andrea Swift (su madre, que padece cáncer de mama desde 2015), Soon You’ll Get Better, una de las mejores canciones de la carrera de Swift, conecta a nivel lírico y musical con The Best Day (Fearless, 2008).

False God

Las revoluciones siguen en mínimos en esta exquisita composición de sonido ochentero, acompañada por un saxo y un efecto de voces que recuerda a los empleados por Nelly Furtado en All Good Things (2006).

You Need to Calm Down

Tras las introspectivas Soon You’ll Get Better y False God, llega el primer himno LGTBIQ de la discografía de Taylor Swift. Al igual que muchos de los temas de Oh Long Johnson (2019) de Miss Caffeina, la letra también hace referencia al acoso que se sufre en las redes sociales.

Bastante simple y perteneciente al estilo synthpop, 2 son los elementos que mejoran, de forma sustancial, la percepción general del segundo sencillo de Lover de Taylor Swift: su videoclip y saber que está ideada para combatir la LGTBIQfobia y el machismo (al final del tema denuncia los enfrentamientos entre mujeres, orquestados y avivados por los medios de comunicación).

Los 3 tipos diferentes de personajes del vídeo

• Referentes del colectivo (Hanna Hart, Jade Jolie, Dexter Mayfield, Adam Lambert, Ellen DeGeneres, Todrick Hall, RuPaul, Laverne Cox, Billy Porter, Adam Rippon, Hayley Kiyoko, A’keria Chanel Davenport, Delta Work, Bobby Berk, Karamo Brown, Jonathan Van Ness, Tatianna, Trinity the Tuck, Riley Knoxx, Adore Delano, Chester Lockhart, Antoni Porowski, Tan France, Trinity K. Bonet, Jesse Tyler Ferguson y Justin Mikita)
• Mujeres feministas (Ciara, Katy Perry y Taylor Swift)
• Aliades de ambas luchas hermanadas (Ryan Reinolds)

Aquellos que participan de lleno son los 2 primeros grupos, ya que forman parte de los colectivos oprimidos. En cambio, Reynolds aparece en la posición que le corresponde, de espectador que apoya y respeta (su papel es pintar un cuadro de Stonewall Inn), pero que no busca un protagonismo que no es el suyo.

Diversidad de verdad

Otro punto a favor del vídeo es que incluye a personas de diferentes etnias, cuerpos, orientaciones sexuales e identidades de género.

Por eso, aunque la referencia más explícita al colectivo, en la letra de la canción, sea la palabra gay (el español y el catalán son los únicos idiomas en los que gay solo significa hombre homosexual), todo el concepto en sí es representativo, dado que hay visibilidad trans, lésbica, gay, de realidades seropositivas (Trinity K. Bonet) y bisexual (se cree que la peluca que lleva Swift con la bandera bisexual es su salida del armario).

Todo You Need to Calm Down es un riesgo para la carrera de Taylor Swift, que siempre ha recibido un gran apoyo comercial por parte del ala conservadora de Estados Unidos, pero la gran muestra de valentía es renegar de ese público retrógrado de forma explícita:

El bienestar económico no puede estar por encima de los derechos de las personas y las creencias religiosas no deben amparar la desigualdad y discriminación son los mensajes que transmite Taylor Swift al renunciar al apoyo del público que la encumbró.

Afterglow

La esencia Lana del Rey vuelve a hacer acto de presencia en la magnífica décimo quinta pista de Lover de Taylor Swift. En este caso, de la misma forma que lo hacía en Wildest Dreams de 1989: a imagen y semejanza del chamber pop de del Rey.

ME!

Interpretado junto a Brendon Urie de Panic! At the Disco, este es, sin lugar a dudas, uno de los peores sencillos de toda la carrera de Swift. Como ocurre con todo el álbum, las escuchas son benévolas con él y, al final, sus puntos fuertes pueden más que los negativos.

Dentro del primer grupo, se encuentran lo bien que cuadran las voces de les intérpretes, la similitud del estribillo con el de Next to Me (2012) de Emeli Sandé, un sonido doo-wop que bebe de Shake It Off y lo pegadiza que es.

En cambio, en el grupo de los fallos, figuran los estridentes “me-e-e-e” y una sensación de luminosidad forzada.

It’s Nice to Have a Friend

Simple, repetitiva, angelical y efectiva es esta breve balada semi-acústica, cuyo mensaje de agradecimiento contrasta con el egocentrismo de ME!

Daylight

Lover de Taylor Swift llega a su fin con el género más recurrente del trabajo, el synthwave. En este caso, envuelve un delicado medio tiempo de melodía in crescendo, en cuya letra la artista cierra, de forma definitiva, la etapa más difícil de su vida (la que precedió el lanzamiento de reputation).

Así, a lo largo de Daylight, Swift reconoce que ha cometido errores, que ha sido cruel, que ahora ya está despierta del todo (en este tiempo, Swift ha sido consciente del privilegio blanco) y no puede ignorar las injusticias (clara referencia a su silencio político), para, al final, concluir que quiere definirse por lo que ama, no por lo que odia o le da miedo.

Esa última frase resume lo que es Lover de Taylor Swift: un trabajo donde ha reunido los estilos musicales que adora (synthwave, synthpop, country, pop acústico, soul-doo/wop de ecos hip hop, rockabilly y funk) y ha dejado atrás el resentimiento y la actitud vengativa de reputation.

¿De verdad tiene un trasfondo político Lover de Taylor Swift?

Al finalizar nuestra crítica de Witness de Katy Perry, concluimos que estaba lejos de ser el álbum político de la artista. Esto se debía a que de las 15 canciones, solo 5 podían vincularse con ese purposeful pop, que había anunciado a bombo y platillo. 

En el caso de Lover de Taylor Swift, de los 18 cortes del disco, las intenciones o declaraciones políticas son evidentes en You Need to Calm Down, The Man, Daylight y Miss Americana & The Heartbreak Prince (denuncia la desigualdad del mundo actual e invita a combatirla).

El resto de temas se centran, sobre todo, en las relaciones de amor sanas, en las inseguridades de Swift y en las reflexiones y buenas compañías que le han permitido superar el fatídico 2016

Por tanto, al igual que Perry o Within Temptation este año, Taylor Swift no ha entregado con Lover su trabajo político, aunque sí sea el primero en el que ha visibilizado sus inquietudes políticas.

Veredicto sobre Lover de Taylor Swift

La era reputation comenzaba con el impactante videoclip de Look What You Made Me Do, en el que Swift declaraba que la antigua Taylor no podía ponerse al teléfono, ya que había muerto.

Pese a ello, parte de su esencia no se marchó y, por eso, cuando analizamos reputation, dividimos el álbum entre los temas que sonaban a la antigua Swift, a la nueva, a la de las eras 1989 y Red y la que fusionaba 1989 con reputation.

En el caso de Lover de Taylor Swift, las Swift que encontramos son la acústica-country, la popera (1989 y Red) y la nueva, que no es más que una versión conciliadora y mejorada de todas las que hemos visto en sus 13 años de carrera.

Ahora, la actitud malévola y vengativa ha dado lugar a madurez, luminosidad, reconciliación consigo misma y exaltación de su forma de componer y tratar sus experiencias vitales.

La rabia y el rencor de Taylor Swift en reputation se han transformado en una reivindicación sana de sí misma y de los buenos sentimientos y acciones.

El único defecto de Lover de Taylor Swift son las canciones de relleno, sobre todo, Cornelia Street y London Boy, que empañan un álbum que, pese a ello, convence y que, tras los sustos con ME! y You Need to Calm Down, confirma que Swift sigue en plena forma.