Edificios modernistas en Madrid que no lo parecen

Los edificios modernistas en Madrid están cifrados en torno a 200. No obstante, la gran mayoría pasa inadvertida, puesto que su Modernismo es nimio. De ese inmenso grupo, destacamos 30, así como una pareja que, tras diferentes reformas, ha mutado en Art Decó.

30 edificios modernistas en Madrid que no lo parecen

• Viviendas para Vicente Llopis

Con portal en la calle Alcántara, 73, pero también con fachadas a Francisco Silvela y Maldonado, las viviendas para Vicente Llopis pueden pasar como un ejemplo más de arquitectura ecléctico-beaux arts de la capital.

No obstante, si nos detenemos y observamos con atención, se manifiestan ornamentos que lo convierten en uno de los edificios modernistas de Madrid:

• Motivos vegetales y femeninos en el dintel del portal
• Otros motivos vegetales en el dintel sobre la ventana central de la tercera planta
• Más hojas en las ménsulas que sostienen el mirador y el cuerpo central de la fachada a Maldonado
• Los óculos que dan a Maldonado

• 2 edificios de viviendas para el marqués de Valdeterrazo

Al igual que las viviendas para Vicente Llopis, estas en Hortaleza 57 y Hernán Cortés 21 se ubican en lo que parece una edificación ecléctica del Madrid de finales del siglo XIX y principios del XX.

Lo parece y lo es, pero en su fachada pueden encontrarse tímidos y sutiles elementos Art Nouveau:

• Rostros femeninos en dinteles
• Motivos vegetales en ménsulas, flanqueando los rostros femeninos y en los medallones
• El entrepaño que da a Hernán Cortés

Diseñadas por Mariano Belmás Estrada, estos 2 inmuebles se levantaron de 1902 a 1904. Debido a ello, forman parte de la primera etapa del Modernismo madrileño (1896-1904).

• Viviendas para Francisco Martínez Fresneda

Subimos un escalón con Sagasta 14.

Sí, de nuevo, estamos ante otro de esos edificios modernistas en Madrid para los que parece que hace falta un máster que ayude a identificarlos. No obstante, en las neobarrocas viviendas para Francisco Martínez Fresneda (1906), Antonio Farrés Aymerich incluyó un Art Nouveau más evidente.

Como muestra:

• Dinteles, frontón, ménsulas y rejerías

• El interior del portal

• Viviendas en la plaza de Guardias de Corps, 1

Junto a las algo más obvias (como Art Nouveau) viviendas en el número 2 de la plaza de Guardias de Corps, se sitúan estas en la esquina con la calle Limón, 21.

De autoría desconocida y fecha de construcción estimada en 1905, ante todo, queda enmarcado en la arquitectura ecléctica-neobarroca.

Y, si en otros edificios modernistas en Madrid, los ornamentos de escayola tienen la clave, en este, sobre todo, ella reside en las sinuosas formas de las rejerías.

También, en los óculos a Limón y los motivos vegetales (dispuestos en orlas, ménsulas y pilastras). Estos últimos pueden calificarse como neobarrocos-nouveau.

• Villa Rosario

Hasta ahora, todos estos edificios modernistas en Madrid se ubicaban en torno al centro de la ciudad. Con la Villa Rosario, cambian las tornas y nos vamos hasta el barrio de la Concepción.

En concreto, al número 65 de la calle Arturo Soria (vía principal del distrito homónimo). Allí, en torno a 1905, se le atribuye a Ricardo Marcos Bausá el diseño de este coqueto palacete.

Su Art Nouveau puede calificarse como tenue y solo presente en los esgrafiados, la marquesina y algún que otro motivo vegetal en ménsulas.

Ciudad Lineal, un Madrid que se ha perdido

Arturo Soria (era urbanista) concibió la Ciudad Lineal a finales del siglo XIX. Iba a ser una circunvalación de 53 kilómetros que rodearía los límites de la ciudad, desde el entonces pueblo de Fuencarral (ahora barrio de Valverde) hasta Pozuelo de Alarcón.

La falta de fondos obligó a que el proyecto quedase reducido al primer tramo, germen del actual distrito de Ciudad Lineal. Después de años de obras paralizadas, tras la Guerra Civil, la idea de Arturo Soria quedó descartada y, poco a poco, los palacetes fueron sustituidos por bloques de viviendas.

No obstante, aunque la distribución original (viviendas unifamiliares-jardines privados-carril para vehículos-bulevar arbolado con línea de tranvía-paseo central-bulevar arbolado-carril para vehículos-jardines privados y viviendas unifamiliares) se perdió, el bulevar central se ha respetado y la mayor parte de bloques no superan las 5 plantas.

• 2 edificios de viviendas para José Martínez Lestegar

Totalmente eclipsadas por las viviendas brutalistas de San Bernardo y porque parecen las típicas construcciones de ladrillo + balcones y miradores en torno al año 1900, San Bernardo 87 y 89 cuentan con unos originales dinteles modernistas.

También, con unas rejerías (en balcones y miradores) muy poco habituales (por su ligereza y forma bulbosa) entre los edificios modernistas en Madrid.

Una fórmula que evolucionó

Esta pareja data de 1907 y es obra de Arturo Pérez Merino, quien perfeccionaría este tipo de Modernismo madrileño con las Viviendas para Manuel García Arregui. Del mismo año, sus miradores, rejerías y demás ornamentos pueden calificarse como Art Nouveau a simple vista.

Por cierto, a Pérez Merino también le debemos el más obsceno (para los estándares de la época) de todos los edificios modernistas en Madrid: la Casa de los Penes y Vaginas (1912).

• Viviendas para Andrés González

Situadas en los números 7, 12 y 16 de las calles Reyes, Álamo y Manzana, respectivamente, estas viviendas fueron diseñadas por Miguel Mathet Coloma.

De nuevo, con esta obra, nos encontramos ante uno de esos edificios modernistas en Madrid que, dentro de un eclecticismo de fuerte influencia afrancesada, inserta posos de Art Nouveau.

Como puede apreciarse en las imágenes sobre y debajo de estas líneas, el Modernismo presente en este inmueble de 1908 se limita a la escayola de los dinteles, la cornisa, las guirnaldas que coronan el chaflán y las rejerías.

Dentro de este último grupo, merecen mención aparte las delicadas formas sinuosas del acceso principal, el primer aviso de que la arquitectura modernista también pasó por esta zona del barrio de Universidad.

• Colegio de las Damas Negras

Eclipsado por la monumentalidad neogótica y neomudéjar del adyacente Colegio de San Diego y San Vicente de Paúl (1906), el aparentemente más sencillo Colegio de las Damas Negras cuenta con la baza de que aporta más diversidad a los edificios modernistas en Madrid.

Obra de Vicente Lampérez Romea y abierto en 1909, su arquitectura neomudéjar esconde retazos Art Nouveau en las rejerías y el acceso central. Este último se compone de un arco rebajado con 2 parteluces, combinación recurrente en el Modernismo.

En el pasado, el actual Colegio Blanca de Castilla contaba con esgrafiados de tímido Art Nouveau en los entrepaños y frisos de la fachada y en la cornisa. No obstante, se perdieron en algún momento entre 2007 (recogidos en Madrid modernista: guía de arquitectura) y 2013.

Centro de tortura en el franquismo

En 2013, Público dedicaba un artículo a los diferentes centros de tortura en el Madrid franquista. Con el objetivo de aniquilar cualquier resquicio o iniciativa de resistencia, de 1939 a 1945, la dictadura estableció 21 cárceles en la capital.

Justo en el Colegio Blanca de Castilla, se encontraba la prisión Cisne (en la Guerra Civil, fue hospital y checa). Por ella, pasaron Joan Català Balanyà (consiguió escapar, según CGT Catalunya) y Julián Besteiro.

• Viviendas para Santos Galán

Salvando las distancias, este edificio es a la plaza del Conde de Barajas lo que la obra de Enrique Pfitz y López es a la de Oriente:

• Lo vertical prima sobre lo horizontal
• Domina el cielo de la plaza
• Cuenta con un mirador central que capta toda la atención

Más allá de este paralelismo, las viviendas para Santos Galán (1912) entran por los pelos entre los edificios modernistas en Madrid. La razón de ello reside en que, al modificar su propio diseño (1909), Valentín Roca Carbonell convirtió la antigua casa-taller en viviendas burguesas.

De esta manera, perdieron parecido con la manzana de las viviendas para la Duquesa de Fernán Núñez. Así, su Modernismo se intuye en las rejerías, dinteles, ménsulas y el remate del mirador.

• Viviendas para José Gómez

De Cesáreo Iradier Uriarte, su tibio Modernismo se hace notar en:

• Forjas de los miradores, portal, balcones y ventanas
• La cornisa
• Los motivos vegetales en dinteles y ménsulas

• Viviendas para Fernando Varela

Como tantos otros edificios modernistas en Madrid, este de Mesonero Romanos 3 ha sido mutilado en reformas posteriores. De hecho, del aspecto original (Luis López López, 1909), solo quedan las rejerías con láureas y líneas paralelas, así como el dintel de la puerta.

• Viviendas para Modesto González

En la imagen de portada para este artículo, se muestra el mirador curvo de estas viviendas. Como otros edificios modernistas en Madrid, sobre todo de la presente lista, este diseño de Plácido Francés Mexía se enmarca en la arquitectura ecléctica-neobarroca.

No obstante, entre su ostentosa ornamentación, puede hallarse Modernismo. En este caso, de corte secesionista:

• Rejerías de los antepechos y balcones
• Esgrafiados en los entrepaños
• Decoración de las pilastras junto a los esgrafiados

• Viviendas para Zoilo de Castro (I)

Si en su compañera de la plaza de Barajas, 4 ya es difícil encontrar ornamentos típicos de los edificios modernistas en Madrid, en esta del número 6, la tarea se complica más.

Como las viviendas para Santos Galán, estas para Zoilo de Castro (1912) también fueron proyectadas por Valentín Roca Carbonell. Además, también pertenecen a la manzana Art Nouveau entre las plazas del Conde de Barajas y San Miguel.

¿Qué es modernista en estas viviendas?

• La firma de Valentín Roca Carbonell
• Los plafones circulares
• Las rejerías

• Calle Calatrava, 44

También con portal a la carrera de San Francisco, 15, data de 1910. Al pasar frente a él, muy poca gente se percatará de que está ante uno de los edificios modernistas en Madrid.

Nada extraño porque este inmueble de autoría desconocida casi parece que quiere esconder su vertiente Art Nouveau. La encontramos, no obstante, en:

• Los ornamentos verticales en torno al mirador
• Rejerías
• Orlas sobre la quinta planta
• Molduras vegetales del chaflán

• Viviendas para Agustín Cano (I)

A simple vista, parece imposible que unas fachadas tan sumamente desnudas de ornamentos puedan considerarse modernistas.

Recordemos, eso sí, que estamos hablando de edificios modernistas en Madrid, ¡aquí todo es posible!

Si sacamos la lupa o, mejor dicho, nos fijamos en las forjas, la historia cambia. De hecho, esos son los únicos resquicios de Modernismo en esta obra de José Carnicero Rodríguez, que ha perdido su revestimiento original.

• Viviendas para Antonio López Rosso

Valentín Roca Carbonell volvió a apostar por Modernismo liviano en estas viviendas de 1915. En este sentido y dentro del eclecticismo que desprende la obra, situó trazas de Art Nouveau y Secesionismo vienés:

• Orlas de escayola (Art Nouveau)
• Vegetales y flores en ménsulas y dinteles (Art Nouveau)
• Líneas horizontales, cortadas por círculos (Secesionismo vienés)

• Viviendas para Gregorio Rubio (I)

En pleno distrito de Tetuán, se localizan estas viviendas proyectadas por Luciano Delage Villegas. De aspecto convencional, los elementos que lo delatan como uno de esos edificios modernistas en Madrid, que no lo parecen, son:

• La placa con la firma y fecha de construcción (1915)
• Ménsulas y vanos con motivos vegetales

• Plaza del Rastrillo, 1

Que levante la mano la persona que, al pasar por la plaza del Rastrillo, haya pensado, alguna vez, que el inmueble rosa es Art Nouveau.

¿Nadie?, normal, puesto que se trata de uno de esos edificios modernistas en Madrid que no lo ponen fácil si vinculamos Modernismo con Barcelona, Melilla o Cartagena.

De hecho, en esta obra de 1915 y autoría desconocida, habita en los vegetales de las ménsulas, las flores sobre las ventanas y los antepechos (fachadas a Tesoro y Marqués de Santa Ana).

• Viviendas para Jesús Espiga

Aunque la primera impresión que causan estas viviendas en Fray Luis de León, 7 y Sebastián Elcano, 17 sea de arquitectura neomudéjar o regionalista, lo cierto es que Francisco García Nava llevó esos estilos al renovador lenguaje del Art Nouveau.

Como en la mayor parte de los edificios modernistas en Madrid, ese lenguaje renovador se queda en la superficie. Sin embargo, tampoco hay por qué despreciarlo, ya que, en el caso de este inmueble de 1918, la vanguardia supone:

• Ornamentación cerámica con formas florales
• Mirador macizo en el chaflán

• Frisos de corte secesionista
• Ménsulas con motivos vegetales

• 4 edificios de viviendas para Benito Domínguez

Ubicadas en la calle Mesón de Paredes, en la actualidad, si puede intuirse que este es un conjunto modernista, desde luego, el número 84 no lo pone nada fácil.

Y es que, junto a sus hermanos, perdió la mayor parte de su ornamentación en algún momento entre 1923 y principios del siglo XXI. Lo más grave, no obstante, ha tenido lugar en los últimos años, cuando se le ha privado de su cornisa curva. Ahora, el Modernismo solo permanece en las rejerías.

En cuanto a los números 86, 88 y 90 (como el 84, diseñados por Isidro de Benito Domínguez), además de las rejerías, conservan la curvatura de las fachadas y motivos vegetales en ménsulas y dinteles.

• 4 edificios de viviendas para David Macías

José Carnicero Rodríguez proyectó estos 4 bloques, situados entre Santa Engracia, 129 y Ríos Rosas, 14. Aunque aún conservan elementos modernistas (rejerías, ménsulas, dinteles y carpinterías), no son ni la sombra del aspecto primigenio.

• Teatro Muñoz Seca

A diferencia de otros edificios modernistas en Madrid de esta lista, el que acoge el Teatro Muñoz Seca no ha sufrido ninguna mutilación de fachada. Por suerte o por desgracia, siempre fue así de sencillo.

Lo diseñó José Espelius Anduaga en 1920. Inaugurado 2 años después, después de este teatro, se construyeron las 4 últimas obras del Modernismo madrileño:

• Viviendas de Alfonso XII, 58 (1922)

• Cine Doré (1923)

• Casa-taller de Patricio Romero (1925)

• Iglesia de Santa Teresa y convento de los Padres Carmelitas (1928)

2 edificios modernistas en Madrid que ahora son Art Decó

• Taller de ebanistería Lissárraga

En la manzana que une San Miguel y Conde de Barajas, se levanta este taller. Situado en el número 5 de Conde de Barajas, le debemos su diseño a José López Sallaberry. O, mejor dicho, se lo debíamos cuando formaba parte de los edificios modernistas en Madrid.

Del Modernismo secesionista no queda nada desde 1932. Entonces, la fachada fue mutilada y la estructura, redefinida. Todo ello se realizó para adaptar el inmueble a Cinearte, los primeros estudios de cine sonoro en la capital.

• Casa-taller de José Yagües

En 1910, quedaba inaugurado el antiguo edificio para la casa-taller de José Yagües. Obra de Valentín Roca Carbonell, se desconoce quién le añadió 2 plantas y arrasó con la mayor parte del Modernismo original.

Tampoco existe documentación respecto a cuándo la casa-taller mutó en una singular pieza del Art Decó Zigzag Moderne madrileño: